Rea Ann Silva y Verónica Lorentz, eran dos maquilladoras de prestigio que no quedaban del todo satisfechas con el acabado que daban otros aplicadores y en 2003 crearon la Beauty Blender, Con la apariencia de un huevo rosa, su forma está perfectamente diseñada para llegar a todos los rincones de nuestra cara. Con ella se puede aplicar todo tipo de productos cosméticos, desde bases fluidas a cremas hidratantes o hasta autobronceadores, pasando por coloretes el polvo o sobras de ojos.
La maravillosa esponja Beauty Blender, tiene una legión de seguidoras por su acabado magnífico a la hora de maquillar.
El secreto, aplicar los productos fluidos con la Beauty Blender humedecida y los que son el polvo con la esponjita seca. Al no contener latex, es hipoalergénica y apta hasta las pieles más sensibles.